Bajo el paraguas del «Internet de las cosas» se desliza la idea del «todo conectado». Ya contamos con teléfonos móviles y tabletas (con internet, por supuesto) y el siguiente paso lleva a conectar todo tipo de objetos, aunque en ese devenir se sitúa a la televisión como una de las patas principales en esta revolución.
Igual que en años anteriores, Samsung ha celebrado, a pocas semanas de comenzar el congresos mundial de móviles Mobile World Congressde Barcelona, en el que presentará el nuevo Galaxy S6, su Forum particular, un espacio que la compañía coreana replica en todo el mundo y que, para Europa, este año se ha celebrado en Mónaco.
Las distintas líneas de producto de la compañía, excepto los móviles, desfilan durante varios días en el Centro Grimaldi de la capital monegasca. Televisores, electrodomésticos, equipos de oficina... y todo bajo el paraguas del «Internet de las cosas», que cruza la frontera de los «smartphones» y se instala cómodamente en cualquiera de los aparatos y dispositivos que todos tenemos en casa.
Será, según los vaticinios de la propia compañía, en una gran evolución. Así, YH Heom, presidente de Samsung en Europa, habló del desafío tecnológico como uno de los motores capaces de impulsar la economía en Europa y afirmó que «los dispositivos conectados cambiarán los hogares para siempre».
En televisores, Samsung tiene ya un 40% del mercado. Y su apuesta por la resolución UHD o 4K, además de las grandes pantallas curvas, parece estar dando muy buenos resultados. De hecho, y según datos de la propia marca, el 80% de todo el tráfico de internet es de vídeo y el 75% de todos los televisores que se venden ya tienen conexión a internet.
Durante la última edición de la feria de elecrónica CES de Las VegasSamsung presentó sus primeros televisores con tecnología SUHD, que desembarcan ahora en Europa. Se trata de una mejora notable de calidad en las resoluciones Ultra Alta Definición basada en una tecnología de nanocristales desarrollada por la propia compañía y que permite mostrar en pantalla hasta los mínimos detalles con una calidad excepcional. Color, brillo, contraste y definición alcanzan, según la compañía, «un nuevo nivel». Los nuevos televisores, además, incorporan por defecto el sistema operativo Tizen, la apuesta de Samsung para la tecnología «wearable» -vestible, en español- y la conectividad en el hogar.
Igual que en años anteriores, Samsung ha celebrado, a pocas semanas de comenzar el congresos mundial de móviles Mobile World Congressde Barcelona, en el que presentará el nuevo Galaxy S6, su Forum particular, un espacio que la compañía coreana replica en todo el mundo y que, para Europa, este año se ha celebrado en Mónaco.
Las distintas líneas de producto de la compañía, excepto los móviles, desfilan durante varios días en el Centro Grimaldi de la capital monegasca. Televisores, electrodomésticos, equipos de oficina... y todo bajo el paraguas del «Internet de las cosas», que cruza la frontera de los «smartphones» y se instala cómodamente en cualquiera de los aparatos y dispositivos que todos tenemos en casa.
Será, según los vaticinios de la propia compañía, en una gran evolución. Así, YH Heom, presidente de Samsung en Europa, habló del desafío tecnológico como uno de los motores capaces de impulsar la economía en Europa y afirmó que «los dispositivos conectados cambiarán los hogares para siempre».
En televisores, Samsung tiene ya un 40% del mercado. Y su apuesta por la resolución UHD o 4K, además de las grandes pantallas curvas, parece estar dando muy buenos resultados. De hecho, y según datos de la propia marca, el 80% de todo el tráfico de internet es de vídeo y el 75% de todos los televisores que se venden ya tienen conexión a internet.
Durante la última edición de la feria de elecrónica CES de Las VegasSamsung presentó sus primeros televisores con tecnología SUHD, que desembarcan ahora en Europa. Se trata de una mejora notable de calidad en las resoluciones Ultra Alta Definición basada en una tecnología de nanocristales desarrollada por la propia compañía y que permite mostrar en pantalla hasta los mínimos detalles con una calidad excepcional. Color, brillo, contraste y definición alcanzan, según la compañía, «un nuevo nivel». Los nuevos televisores, además, incorporan por defecto el sistema operativo Tizen, la apuesta de Samsung para la tecnología «wearable» -vestible, en español- y la conectividad en el hogar.